El coaching empresarial es un proceso que tienen como objetivo mejorar el equipo humano de una empresa u organización, aumentando su productividad, optimizando su desempeño e incrementando la motivación y satisfacción, lo que repercutirá favorablemente en los resultados de la compañía.
Esta técnica se ha vuelto muy popular en los últimos años debido a su elevada rentabilidad y a los numerosos beneficios que brinda a las empresas que apuestan por ella.
El coaching empresarial o mentoring empresarial, puede ser individual, centrado en una única persona, ya sea un empleado con dificultades, un gerente o el director de una compañía, o bien grupal, trabajando con un equipo, un departamento, incluso con la empresa en su conjunto. En cualquiera de las dos opciones, la organización percibe los resultados del mentoring empresarial de manera directa o indirecta.
Mientras que el coaching ejecutivo es una rama dentro del coaching empresarial que, tal y como su propio nombre indica, está dirigida exclusivamente a ejecutivos que buscan conseguir un cambio en su comportamiento, es decir, sacar lo mejor de sí mismos, para lograr evolucionar y crecer en su vida personal y profesional.
Son sesiones, por tanto, individualizadas destinadas a personas que tienen bajo su responsabilidad a equipos de trabajo como autónomos, emprendedores, directivos o propietarios de empresas. Se trata de una de las metodologías más eficientes para conseguir y mantener un alto desempeño de los ejecutivos, al desarrollar al máximo el potencial de los líderes de los negocios.
Se aconseja el uso de esta metodología cuando el ejecutivo presenta síntomas de que hay algún aspecto de sí mismo que no funciona como le gustaría, por ejemplo, si se siente inseguro cuando toma decisiones, es incapaz de delegar tareas, gestiona mal el estrés o no sabe trabajar en equipo.
Aunque, también puede ser que el ejecutivo no tenga ningún problema y simplemente quiera fomentar sus competencias de liderazgo, reorientar su carrera profesional, adaptarse al cambio, perfeccionar sus habilidades o conseguir el equilibrio entre la vida personal y profesional.
Los especialistas en coaching empresarial trabajan distintos aspectos con los que logran mejorar la confianza, la comunicación y las competencias directivas del personal de una determinada empresa.
También, impulsan el trabajo en equipo, proporcionan una mayor flexibilidad y adaptación al cambio, enseñan a optimizar el uso de los recursos, aumentan la satisfacción laboral y la productividad y promueven una gestión del tiempo más adecuada.
Además, su efectividad está comprobada, tal y como lo demuestran diversos datos como el informe realizado por la Internacional Personnel Managers, que afirma que si la formación mejora el desempeño en un 22%, cuando se lleva a cabo junto con sesiones de coaching empresarial éste se incrementa en un 89%.
Según una investigación efectuada por Manchester Inc, con cien ejecutivos de las empresas Fortune, una compañía con programas de coaching empresarial recupera 5,7 veces lo invertido en ellos.
De igual modo, un estudio de la International Coach Federation puso de manifiesto que las organizaciones encuestadas recobraran 7 veces lo invertido en procesos de mentoring para empresas.
Estos datos no son sorprendentes, teniendo en cuenta que el capital humano es el recurso más importante de una compañía, dado que conservar a personal apático o ineficaz supone un coste muy elevado para una organización, mientras que las estrategias que mejoran su rendimiento y satisfacción le aportan numerosos beneficios, resultando más rentables.