De empresa Frágil a la empresa ágil.
Claves para adaptarse al cambio en el nuevo contexto
Con la aparición del Covid-19 y sus consecuencias, la transformación que muchas empresas y organizaciones tenían que realizar o acelerar ya no van a poder dilatarla más en el tiempo.
Ha llegado el momento, más que nunca, donde la empresa que no sea ágil y tenga los mecanismos para adaptase de manera flexible y rápida a los cambios que constantemente se producen, dejará de existir. El mundo está acelerado, y cada crisis alimenta su velocidad de funcionamiento. Ahora ha sido un virus sanitario, el siguiente “cisne negro” será informático ¿, habrá un fallo sistémico de las redes de telecomunicaciones ¿, de la generación y distribución de la energía ¿. Hay que estar preparados para poder reaccionar de la mejor forma posible.
Desde hace mucho tiempo se viene hablando de la importancia de adaptarse al cambio, de ser flexibles, de la transformación digital, etc… Las organizaciones que van a quedar en el entorno empresarial después de esta crisis, no son las que mejor se adapten al cambio, es condición necesaria pero ya no suficiente, si no las que además lo hagan de una manera más rápida y flexible, es decir de una manera ágil. Ya no importan la naturaleza de los orígenes del cambio, sea legal, social, tecnológica o sanitaria como es la actual, lo que a partir de ahora va a importar es la velocidad y flexibilidad de la empresa por un lado para adaptarse al cambio, y también para ser generador en su mercado de alguna manera de ese cambio . Y esa agilidad se la tiene que proporcionar el propio sistema de gestión que la organización tenga en funcionamiento.
Recordad que hablábamos, y lo comento en pasado porque creo que ahora se normalizará, de entornos y contextos VUCA, volátiles, inciertos, complejos y ambiguos, donde las empresas ágiles liderarán los mercados. Las empresas tienen que ser ya necesariamente ágiles, de lo contrario todos los agentes del mercado y partes interesadas, que interactúen con ellas no querrán seguir colaborando, se verán inútiles, sin valor que aportar a la sociedad.
Los entornos y contextos empresariales son profundamente complejos, los escenarios y la innovación cambian de manera disruptiva, las nuevas necesidades y riesgos que surgen son globales.
La complejidad es la dimensión VUCA más destacable, se convierte en la ausencia de una sola relación causa-efecto, y surgen múltiples factores implicados en un contexto/relación. La complejidad de los hechos y entornos, es la causa de las principales disfunciones de las empresas. Las respuestas a esos problemas que surgen no van a ser siempre las mismas, se acabaron las “recetas” del gurú, y cada empresa tiene que aplicar las soluciones más apropiadas a esa complejidad que solo se le puede gestionar con un sistema de gestión que sea ágil. Si además ese sistema de gestión es capaz de promover, causar los cambios relevantes a través de la innovación, estaremos ante una empresa líder en su mercado.
La agilidad empresarial gestiona la complejidad desgranando factores y elementos causales de manera detallada y analítica como un ejercicio habitual de su sistema de gestión.
Va a ser también necesario que los empresarios y directivos que todavía no han interiorizado la necesidad de la agilidad en su modelo de gestión, lo hagan. Los obstáculos y resistencias al cambio, y las actitudes autoritarias y pasivas, sin tener en cuenta sus motivos y razones, tienen los días contados. Hoy el cambio va de liderazgo al servicio de las personas, liderazgos que sean capaces de construir sistemas de gestión confiables, pronto se va a acabar el autoritarismo y la burocracia controladora de las organizaciones tradicionales y obsoletas.
Las organizaciones a las que esta crisis les ha afectado siendo ya ágiles, la nueva situación creada les va a representar una inmensa oportunidad que van a aprovechar al máximo, comenzando por la puesta en marcha de todos aquellos mecanismos que tienen implementados en su sistema de gestión y que les va a permitir la continuidad en las actividades de sus negocios, de manera óptima, y reaccionando rápido ante las inmediatas consecuencias.
Desde FCA Consulting consideramos que un sistema de gestión empresarial debería contar con los siguientes ocho elementos que permita a las organizaciones ser ágiles :
- Liderazgo directivo transversal en los procesos, que desarrolle, motive intrínsecamente y genere confianza en todas las personas de la organización para gestionar los cambios.
- Toma de decisiones prescriptiva y predictiva, operacionales y estratégicas, basadas en el conocimiento y evidencia del dato a tiempo real, y que fluya entre las personas.
- Enfoque de la gestión basada en los procesos, estratégicos, operacionales y de apoyo, con sus interrelaciones, que permitan un flujo de valor eficiente y que optimice los recursos utilizados con herramientas de digitalización y automatización.
- Principio de mejora continua aplicado en la ejecución de todos los procesos que contemple la definición de objetivos, su planificación, revisión y acción, de forma cada vez sean más eficientes y menos burocráticos.
- Innovación gestionada a tres niveles, constante desarrollo y evolución de productos/servicios, procesos, y experiencia de cliente.
- Enfoque de la gestión integrada hacia la satisfacción del cliente, requisitos y aportación de valor.
- Pensamiento basado en riesgos y oportunidades a tres niveles, operaciones, estratégicos, y sistémicos, con planificaciones y acciones concretas.
- Sistema de comunicación, efectivo, transparente y confiable, hacia todas las partes interesadas en la organización.
Además en FCA Consulting creemos que una gestión económica y financiera que proporcione fiabilidad, solvencia, capacidad y recursos, es fundamental para la estabilidad, desarrollo y crecimiento de los negocios.
Aspectos como la previsión y gestión de la tesorería, asegurar la liquidez, la negociación bancaria y búsqueda de financiación, la planificación presupuestaria de gastos, su posible reducción al mínimo operativo, y el análisis de sus desviaciones, proporcionan control y apoyo en la dirección estratégica de las empresas.
Todos estos servicios de gran valor añadido puede ofrecerlos y ejecutarlos FCA Consulting con total garantía de resultados. Sus profesionales, colaboraciones y alianzas, experiencia acumulada, y valores, son factores de éxito para alcanzar las metas propuestas.
Las ventajas de externalizar a través de FCA Consulting el diseño, la implementación y el seguimiento de un sistema de gestión empresarial ágil, y de una gestión económico financiera efectiva y solvente son las que siguen :
- Profesionales con dilatada experiencia, amplios conocimientos, y habilidades directivas, capaces de gestionar proyectos de cambio empresarial.
- Partners expertos en aquellas áreas de gestión que requieran de una mayor especialización de conocimiento.
- Reducción de costes fijos y flexibilidad en el desarrollo de los proyectos.
- Se vence la resistencia al cambio de la mano de directivos con perspectivas independientes.
- Visión fresca, sin vínculos con el pasado, ni condicionantes de futuro.
- Liberación de recursos y esfuerzos que se centran en el corazón de la actividad del negocio.
- Adaptación e inmediatez a las necesidades temporales.
- Refuerza la capacidad de ejecución del empresario, o equipo directivo actual, a través de la transferencia programada del conocimiento .
- Se consiguen rápidamente ventajas competitivas con impacto en resultados.
- Posibilidad de convertir el servicio en asesoramiento continuo al empresario.
Nuestro objetivo es claro, aportar valor y un total compromiso con los resultados de nuestros clientes.
Juan Antonio Heras. Directivo y Consultor Empresarial
Desde FCA Consulting queremos aportarte valor, y para ello dispondrás de un diagnóstico inicial de tu empresa sin coste!.
Solicítalo! Sólo tienes que escribirnos a info@fca-consulting.es